Los caminos de la plenitud personal en la vida cotidiana. Estructura de la conciencia: placer y realización.
En este curso exploramos los más íntimos procesos de la conciencia, aquellos que le confieren a nuestra vida diaria la mayor significación. Nos adentramos en la percepción del tiempo y analizamos la estructura psicológica del instante presente; es decir, la manera como se configura el Aquí y el Ahora a través de las unidades psíquicas de tiempo: la perla temporal de la realización humana.
Un tema central en la vida de todo individuo, ya que nuestra realización personal entra en juego todos los días, a cada momento, en cada una de nuestras acciones. No obstante, la mayoría de las personas no se percata de la tremenda importancia del instante presente y, en consecuencia, no le presta la atención suprema que requiere, con las muy lamentables consecuencias del caso. En efecto, no se dan cuenta de que su felicidad y plenitud es algo que se dirime en las más sencillas y pequeñas acciones de su vida cotidiana, algo que está al alcance de todos, a cada instante. Por el contrario, piensan que la felicidad de los seres humanos es algo que se genera por medio de grandes y trascendentales acciones, en días muy especiales, y en momentos muy importantes. No le atribuyen a cada instante el supremo valor potencial de realización que lo caracteriza.
Naturalmente, uno de los grandes objetivos de este curso radica, precisamente, en profundizar al interior de estas unidades psíquicas de tiempo para estudiar las funciones primordiales de la conciencia y la manera como se manifiestan en la totalidad del potencial humano, descubriendo un extraordinario catálogo de placeres vinculados con la más plena realización personal: instintiva, motriz, sexual, emocional y racional. Estudiaremos además el timón de la conciencia y cómo conducirla; la mecánica del deseo y la manera como se educa la voluntad a través del placer; la fuerza y las posibilidades del deseo unificado y, por último, el Círculo Virtuoso, un proceso que nos permitirá experimentar la máxima plenitud, en las más sencillas acciones de nuestra vida diaria, configurando cada instante presente, como una suprema perla de realización personal, donde damos lo mejor de nosotros mismos a los demás. Nuestro amor trasciende en los otros, en la creación conjunta del bien común, el bien de la comunidad.